viernes, 15 de agosto de 2008

EL MEDIO ES EL MENSAJE...

El medio es el mensaje, evidentemente*
*En Olac Fuentes Molinar (comp.), crítica a la escuela. El reformismo radical en Estados Unidos, México, SEP/El Caballito, 1985, pp. 107-115. [publicado originalmenteen Neil Postman y Charles Weinggartner, Teaching as a subversive activity, Dell Publishing Co., 1969. N. Del ed.]
Consideremos, como un primer caso, la noción de que una lección está compuesta de dos factores: Contenido y Método. El contenido puede ser trivial o importante, pero siempre se ha considerado como la “esencia” de la lección; es lo que los estudiantes van a “adquirir”; es lo que supuestamente van a aprender; es lo que se “cubre”.
Cualquier libro de texto muestra que el contenido existe independientemente – y antes – del estudiante y que no depende del medio que lo “trasmite”. Por otra parte. El método es simplemente la forma en que se presenta el contenido. El método puede ser imaginativo o aburrido, pero nunca es otra cosa que el medio para trasmitir el contenido. No posee un contenido propio. Si bien puede producir estímulo o aburrimiento, no lleva consigo ningún contenido, por lo menos no del tipo del que se habla en las juntas universitarias.
Conforme a lo que sabemos, todas las escuelas de educación y las instituciones que preparan a los maestros en Estados Unidos están organizadas bajo la idea de que el contenido y el método están separados en la forma que hemos descrito anteriormente. Quizá el mensaje más importante que se trasmite a los maestros que se están preparando es que esta separación es real, útil y prioritaria y que debe ser conservada en las escuelas. Un mensaje complementario indica que además de que el “contenido” y el “método” están separados, no son iguales.
Todo el mundo sabe que los cursos “verdaderos” son los de contenido, del tipo que James Bryant Conant prefiere: La herencia de Grecia y de Roma, Cálculo, Drama, Isabelino, La Guerra Civil. Los cursos “de relleno” son los de método, esas invenciones de irrelevancias que son universalmente ridiculizadas debido a que su mayor ambición es instruir sobre cómo hacer planes de enseñanza, cuándo usar un proyector y por qué es deseable mantener una temperatura agradable en el salón de clases. (los educadores tienen lo que merecen con esto. Como se han cnformado con una definición trivial de “método”, lo que han podido hacer en sus cursos ha oscilado desde lo lamentable hasta lo escandalizante. Los profesores de humanidades hasta ahora han podido evadir la censura y el ridículo que se merecen al no haberse dado cuenta de que una “disciplina” o un “tema” son formas de conocer algo – en ciertas palabras, un método – y que, por consiguiente, sus cursos son de método.)
“El medio es el mensaje” implica que la invención de la dicotomía entre contenido y método es no sólo ingenua sino peligrosa. Implica que el contenido central de cualquier experiencia de aprendizaje es el proceso a través del cual se aprende. Casi cualquier padre sensato sabe esto, como también lo sabe cualquier sargento eficiente. Lo que cuenta no es lo que se dice a la gente, sino lo que se pone a hacer. Si la mayoría de los maestros no han comprendido esta idea, no es por falta de evidencia. Su error consiste en no haber mirado hacia donde se puede encontrar la evidencia. Para poder comprender qué tipo de comportamiento promueve la escuela, uno debe acostumbrarse a observar qué hacen realmente en ellas los estudiantes. Lo que los estudiantes hacen en los salones es lo que aprenden (Como diría Dewey) y lo que aprenden a hacer es el mensaje de la clase (Como diría Mcluhan). Ahora bien, ¿Qué hacen los estudiantes en el salón de clase? Bueno, por lo general, sentarse a escuchar al maestro. Básicamente, se les exige que crean en las autoridades o, por lo menos, que lo finjan cuando presentan exámenes. Casi siempre se les pide que recuerden. Casi nunca se les exige que hagan observaciones, formulen definiciones o desarrollen cualquier operación intelectual que vaya más allá de la repetición de lo que otra persona dice que es verdadero. Raramente se les motiva a formular pregruntas sustanciales, aunque si se les permite que hagan preguntas sobre detalles administrativos y técnicos. (¿Qué tan largo debe ser el ensayo? ¿Cuenta la ortografía? ¿Cuándo se debe entregar el trabajo?) son casi enexistentes las ocasiones en que los estudiantes juegan un papel en la determinación de los problemas que valen la pena de ser estudiados o de cuáles procedimientos de investigación deben seguirse. Examinen los tipos de preguntas que los maestros hacen en las aulas y encontrarán que casi todas son lo que técnicamente podría llamarse “preguntas convergentes”, pero que sencillamente se podrían denominar preguntas de “adivina en lo que estoy pensando”.
He aquí algunas que son familiares:
• ¿Qué es sustantivo?
• ¿Cuáles fueron las tres causas de la guerra civil?
• ¿Cuál es el río principal de Uruguay?
• ¿Cuál es la definición de una cláusula no restrictiva?
• ¿Cuál es el verdadero mensaje de este poema?
• ¿Cuántos grupos de cromosomas tienen los seres humanos?
• ¿Por qué traicionó Bruto a César?
Así, lo que los estudiantes realmente hacen en clase es adivinar lo que el maestro quiere que digan. Constantemente tienen que dar “la respuesta correcta”. No importa si la materia es inglés o historia o ciencias; en general, los estudiantes hacen lo mismo. Y como se reconoce indiscutiblemente (sino públicamente) que el “contenido” ostensible de tales cursos rara vez se recuerda más allá del último examen (en donde se le pide a uno que recuerde solamente un 65% de lo que se nos ha dicho), podemos decir con toda seguridad que la única cosa que aprendemos en las aulas es aquella que se comunica o trasmite por medio de la estructura de la clase misma. ¿Cuáles son estas enseñanzas? ¿Qué son estos mensajes? Aquí incluímos algunos de entre varios; ninguno se encontrará enlistado oficialmente entre los objetivos de los maestros:
• En relación con las ideas, es preferible la aceptación pasiva a la crítica activa.
• Descubrir el conocimiento está más allá de la capacidad de los estudiantes y no es, en caso alguno, asunto de ellos.
• La memoria es la forma más alta del logro intelectual y una colección de “hechos” no relacionados entre sí es el objetivo de la educación.
• La voz de la autoridad es más valiosa y confiable que el juicio independiente.
• Las ideas propias y las de los compañeros de clase no tienen ninguna importancia.
• Los sentimientos son irrelevantes en la educación.
• Siempre hay una única y no ambigua “respuesta correcta” a una pregunta.
• El inglés no es historia y la historia no es ciencias y las ciencias no son arte y el arte no es música y el arte y la música son materias menores que el inglés, la historia y la ciencia, que son materias superiores, y una materia es algo que uno “toma” y cuando se la ha tomado uno ya la tiene y si se la ha tenido, uno es inmune y no necesita volverla a llevar. (Teoría educativa de la vacunación.)
Cada una de estas enseñanzas se expresa en comportamientos específicos que se exhiben constantemente en nuestra cultura. Por ejemplo, tomemos el mensaje de que la memoria – particularmente el recuerdo de hechos sueltos – es la forma más alta del logro intelectual. Esta creencia explica la enorme popularidad de los concursos de preguntas y la admiración genuina que reciben aquellos competidores que en 30 segundos pueden nombrar las salas de conciertos donde se tocó por primera vez cada una de las sinfonías de Beethoven. ¿De qué otra forma se puede explicar el enorme deleite que experimentan aquellos que juegan “trivia”? – Juego de mesa muy popular en Estados Unidos - ¿Existe alguien más apreciado entre los hombres que aquel que puede resolver una discusión de beisbol identificando, sin equivocarse, al líder de carreras empujadas de la Liga Nacional en 1943 (Bill “Swish” Nicholson.)
Lo que todos nosotros hemos aprendido – (Y qué difícil es olvidarlo), es que no es importante que nuestras respuestas satisfagan las exigencias de la pregunta (o de la realidad), sino que satisfagan las demandas del ambiente del salón de clase. El maestro pregunta. El estudiante responde. ¿Alguna vez han oído hablar de un estudiante que haya respondido a la pregunta siguiente?: ¿Alguien sabe la respuesta a esta pregunta? O que haya expresado: “No entiendo lo que tendría que hacer para encontrar una respuesta” o “Ya se me ha hecho esta pregunta con anterioridad y, francamente, nunca he comprendido lo que significa”. Tal comportamiento tendría como resultado alguna forma de castigo y, desde luego, es evitado escrupulosamente, a excepción de los que “se pasan de listos”. Es así como los estudiantes no aprenden a valorar ese comportamiento. Reciben el mensaje. Pocos maestros expresan conscientemente tal mensaje. No forma parte del “contenido” del programa. Ningún maestro ha dicho jamás: “No valoren ni lo incierto ni lo provisional. No duden de las preguntas. Sobre todo, no piensen”. Se trasmite el mensaje queda, insidiosa, implacable y efectivamente por medio de la estructura del salón de clase, a través del papel del maestro, del papel del estudiante, las reglas de su juego verbal, de los derechos que se asignan, los acuerdos que norman la comunicación, las actividades que se admiran o censuran. En otras palabras, el medio es el mensaje.
¿Alguna vez han oído hablar de un estudiante tomando notas de lo que dice otro estudiante? Probablemente no. Porque la organización del salón de clase pone en evidencia que lo que los estudiantes dicen no es el “contenido” de la lección. Por lo tanto, no se incluirá en los exámenes. O sea, puede ser ignorado.
¿Alguna vez han escuchado hablar sobre un estudiante que tenga interés en saber cómo un autor de libros de texto ha llegado a sus conclusiones? Podemos anticipar que rara vez. La mayoría de los estudiantes no está consciente de que los libros de texto están escritos por seres humanos. Además, la estructura del salón de clase no sugiere que el proceso de cuestionamiento tenga importancia alguna.
¿Alguna vez han oído hablar de un estudiante que sugiera una definición más útil de algo que el maestro ya ha definido? O de un estudiante que preguntara: “¿De quién son esas afirmaciones?”, “¿Qué es un hecho?” o “¿Por qué estamos haciendo este trabajo?”.
Ahora bien, si uno reflexiona sobre el hecho de que casi todos los ambientes del aula están manejados de manera que este tipo de preguntas no se hagan, uno puede deprimirse. Consideren, por ejemplo, de dónde viene el “conocimiento”. No está ahí fortuitamente en un libro, esperando que alguna persona venga y lo “aprenda”. El conocimiento se produce en respuesta a las preguntas. Y un nuevo conocimiento es el resultado del cuestionamiento de nuevas preguntas; a menudo un nuevo cuestionamiento de las viejas preguntas. Aquí está el meollo del asunto: una vez que uno ha aprendido a hacer preguntas – preguntas relevantes, apropiadas y sustanciales – se ha aprendido a aprender y nadie puede evitar que uno siga aprendiendo lo que sea que uno desee o quiera conocer. Recordemos el proceso que caracteriza a los ambientes escolares: los estudiantes se encuentran restringidos solamente al proceso de memorización (parcial y temporal) de las respuestas de uno a las preguntas de otro. Resulta alarmante considerar las implicaciones de este hecho. La habilidad intelectual más importante que el hombre ha desarrollado – el arte y la ciencia de hacer preguntas – no se “enseña” en la escuela y, más aún, es bloqueada en la forma más devastadora posible: adaptando las condiciones y el ambiente para que el ejercicio de hacer preguntas significativas no sea valorado.
Es difícil pensar en escuelas que incluyan este tipo de ejercicio o que desarrollen métodos de cuestionamiento como parte de su curriculum. Pero aun si sabemos de unas cien que lo hicieran, habría pocas razones para celebrarlo, a menos que la enseñanza se organice de manera que los estudiantes puedan hacer preguntas y no sólo hablar de ello, leer o que se hable del tema. Hacer preguntas es una forma de comportamiento. Si uno no lo practica, no se aprende. Así de sencillo.
Si se leen los periódicos, se escucha con atención a la radio y se ve con cuidado la televisión, percibiríamos que nuestras vidas políticas y sociales están influídas considerablemente por personas cuyo comportamiento es precisamente el mismo que era exigido en las escuelas. No necesitamos documentarnos mucho para percibir la extensión del dogmatismo y la timidez intelectual del miedo al cambio, que tienen su origen en la falta de habilidad para hacer preguntas novedosas y esenciales y en la incapacidad de trabajar inteligentemente para obtener respuestas verificables.
El mejor ejemplo que hay sobre este punto puede verse en el hecho de que quienes hacen las preguntas no encajan dentro de lo “establecido”. El precio que se paga por mantener la membresía dentro de lo establecido es la incuestionable aceptación de la autoridad.

miércoles, 25 de junio de 2008

Frutas y Verduras.

Por considerar de vital importancia el conocimiento sobre lo que los seres humanos consumimos en nuestros alimentos, es que cordialmente invito a los lectores de “El cartón de Lagos” – a enterarse por medio de estas líneas del contenido de algunos de los alimentos que se encuentran entre las “FRUTAS Y LAS VERDURAS”; mismas que contribuyen al buen desempeño de nuestro organismo, y a adquirir una mejor calidad de vida entre los pobladores de esta redonda, y contaminada bola errante por los confines del universo.

Recomiendo encarecidamente a quienes hagan el favor de leerme, el revisar la lista de estos elementos, y a incluir en nuestro menú cotidiano el uso – siquiera dos veces por semana – de cada uno de los siguientes ingredientes, ¡Va, pues!:

FRUTAS Y VERDURAS

PROPIEDADES ESPECIALES DE ALGUNAS FRUTAS Y VERDURAS

ACELGA
Esta hortaliza es recomendable para bajar de peso, como depurador sanguíneo, para disolver inflamaciones.

AJO
Normaliza la presión sanguínea, excelente para tratar enfermedades del pulmón, los trastornos de hígado, enfermedades del estómago. Previene las infecciones, ayuda a eliminar el azúcar en la orina, combate la artritis. Normaliza el funcionamiento de los riñones.

ALBARICOQUE O CHABACANO
Por ser fruta rica en potasio resulta importante para los músculos para el bazo y el hígado. Tiene un alto contenido de hierro, lo que ayuda al crecimiento y combate la anemia.

APIO
Excelente para el sistema nervioso, para regular la presión arterial y los dolores de cabeza. Contrarresta la acidez en la sangre; resulta un buen tónico para evitar la fatiga muscular y las enfermedades pulmonares. Previene el reumatismo, la artritis, la nefritis. Es recomendable para personas anémicas, para enfermos de hígado y vejiga.
De fuerte sabor, posee propiedades medicinales – considerado una de las plantas con mayores vitaminas, la principal propiedad es aumentar la diuresis, es decir, que dilata los vasos renales y de esta manera facilita la eliminación del agua y de sustancias tóxicas mediante la orina. Por ello resulta una hortaliza increíblemente benéfica para las personas que sufren de hiperuricemia, gota y retención de líquidos. Además el aceite esencial que contiene tiene propiedades antibacterianas; por ello es un buen aliado en la lucha contra las infecciones de los riñones provocadas por virus o bacterias. Ayuda también a aquellos que padecen de cálculos renales, de vesícula o a quienes tienen tendencia a desarrollar arenillas. Otros que resultan beneficiados de sus cualidades son los enfermos del hígado, pues al eliminar toxinas hacen que éste órgano descanse, ya que no tiene que realizar tanto trabajo para depurar la sangre. Deben evitar su ingestión aquellas personas que sufran de lesiones renales graves, o con inflamaciones en la vejiga, tampoco durante el embarazo, pues puede producir abortos.
Una de las cualidades del apio es ser un buen regulador intestinal, con su ingesta provoca que los movimientos intestinales aumenten y de esta manera, alivia a las personas que sufren de estreñimiento. Ayude a su estómago a realizar una buena digestión con una ensalada de apio fresco, cebolla, pimiento rojo y perejil. Esta preparación abre el apetito, incrementa la producción de los jugos intestinales y ayuda a expulsar los gases producidos en la digestión.
El corazón encuentra en el apio una buena medicina, pues la presión arterial baja el colesterol y tiene un efecto suavemente tranquilizante sobre el cuerpo, por lo que constituye un excelente remedio cardiovascular de origen natural. También ha sido considerado un alimento afrodisíaco, pues se cree que aumenta el deseo sexual e incrementa la potencia viril. La forma más fácil de conseguir estas propiedades es comer apio crudo en ensaladas.

BERROS
Diurético. El berro es desinflamante y ayuda a mineralizar la sangre. Por eso se recomienda en casos de anemia o enfermos convalecientes. Contrarresta los padecimientos del hígado.

BETABEL
Laxante. Limpiador magnifico de los intestinos, de los riñones y ayuda a mejorar la circulación sanguínea. Desaloja residuos orgánicos acumulados.

BRÓCOLI
Tiene un alto contenido de clorofila, abunda en vitamina “C”, previene infecciones

CAMOTE
Indicado para combatir várices internas, además de ser un gran alimento, rico en carbohidratos.

CILANTRO
El cilantro estimula los jugos gástricos. Es muy útil para combatir afecciones hepáticas desarreglos digestivos y tonificar las paredes intestinales.

COL
Muy buena para adelgazar. Cuando usted introduzca la col en sus jugos no tema que le “caiga pesada”. La col tiene mucho azufre, por eso debe ingerirse sin exponer al fuego. Es única para curar inflamaciones. La col es admirable en cubrir úlceras internas. Ideal para combatir dolores musculares, reumatismo, tumores, várices y artritis. Tiene efectos calmantes, combate la infección ocular, tiene propiedades cicatrizantes.

COLIFLOR
Se recomienda comer en jugos frescos para aprovechar todos sus minerales. Son aconsejadas para adelgazar. Gran ayuda en enfermedades del riñón.

ESPÁRRAGO
Tiene propiedades afrodisíacas. Limpia los riñones y el colon.

ESPINACA
Tiene acción laxante, elimina residuos. Tiene mucho hierro; por ello se recomienda para personas con anemia o convalecientes.

GRANADA
Tiene grandes propiedades higiénicas. Diurético y depurativo de la sangre.

FRESA
Reconstituyente físico e intelectual, ayuda a combatir la anemia, combate enfermedades nerviosas. Muy buenas para las personas diabéticas, para las que tienen reuma, artritis y padecimientos renales. Mejora la piel.

JÍCAMA
Tiene propiedades curativas: descongestiona los riñones y purifica los bronquios.

LECHUGA
La lechuga es una verdura extraordinaria. Tonifica los huesos, calma los nervios, combate el insomnio. Protege los bronquios y los riñones. Combate el estreñimiento, elimina irritaciones y dolores de estómago.

LIMA
Alcalinizante de la sangre. Combate cálculos y arenillas de los riñones y las afecciones de las vías urinarias.

LIMÓN
Fruta extraordinaria por ser una de las que más contribuye a la salud humana. Tiene acción alcalinizante y depurativa del sistema digestivo. Es un magnifico desinfectante. Combate la artritis y el reumatismo. Descongestiona y desintoxica el hígado.

MANDARINA
El jugo de mandarina limpia el organismo. Combate el reumatismo, la ciática, la artritis, los problemas renales y de vías urinarias. Limpia el hígado, el páncreas, el bazo. Tonifica los bronquios.

MANGO
Cura las afecciones bronquiales. Limpia el organismo. Combate el insomnio y enfermedades nerviosas. También sirve como laxante y para evitar las depresiones. El ayuno con mango es excelente, revitaliza la sangre.

MANZANA
Esta fruta es conocida por sus altas propiedades curativas. Tiene la ventaja de poderse comer en todas las estaciones. Existe la frase que dice: “Una manzana por la mañana, es una cosa muy sana”. Protege los vasos sanguíneos, rebaja el colesterol, combate la acidez. Altamente purificadora, elimina toxinas, es rica en oxigeno. Limpia el tubo digestivo, ayuda a los pulmones a realizar sus funciones, elimina cálculos en el hígado. Puede realizarse una cura a base de jugo de manzana para perder peso. Es la única fruta que puede mezclarse con toda tranquilidad con cualquier otra y con las verduras. Desinfecta el organismo.

MELOCOTÓN O DURAZNO
El jugo de durazno combate el estreñimiento. Alivia los dolores de garganta y pecho. Limpia el organismo, eliminando toxinas. Tonifica el sistema nervioso y el sexual. Revitaliza los huesos y los músculos. Previene enfermedades de la piel. Limpia el aparato circulatorio.

MELÓN
Ayuda a combatir el reumatismo. Elimina impurezas; es laxante.

NARANJA
Diurética y laxante. Combate inflamaciones de las encías; ayuda al buen funcionamiento del hígado y el bazo. Limpia el organismo de infecciones y microorganismos. Mineraliza la sangre, y mantiene en buena forma las arterias.

NOPAL
Es excelente para los diabéticos, los enfermos del corazón, del hígado. Es un buen depurativo. Tiene efectos laxantes. Elimina toxinas.

PAPA
Evita la hiperacidez del organismo. Ataca las úlceras, el reumatismo, la acidez estomacal, contrarresta el ácido úrico. Es reconstituyente muscular.

PAPAYA
Limpia el organismo. Eficaz contra el estreñimiento, evita la indigestión; abre el apetito y es reconstituyente. Una fruta con aportaciones maravillosas.

PEPINO
Es diurético, depurativo, repara la fatiga, tonifica el corazón, muy bueno para eliminar el exceso de peso.

PERA
Combate el estreñimiento; la gota y el reumatismo.

PEREJIL
Rejuvenece las arterias. Ayuda al crecimiento de los niños; combate infecciones. Favorece la actividad intelectual. Combate la anemia. Se recomienda para combatir padecimientos de las vías urinarias.

PIÑA
Mata cualquier germen. Alcaliniza la sangre, por eso se recomienda para el reumatismo, nefritis, úlcera, llagas y heridas internas. Diurético.

POMELO O TORONJA
Cura los resfriados, depura el organismo, quema el exceso de grasas. Excelente para adelgazar.

PLATANO
Muy rico en Vitamina “C”, también contiene Vitamina A – B-1, B-2 y B-6, niacina, biotina, Vitamina “E”, Vitamina “K”, y una gran cantidad de minerales., para las personas agotadas o para los deportistas constituye la verdadera vitamina del trabajo. Cura el malestar estomacal y fortalece el revestimiento gástrico contra el ácido y las úlceras.

RABANO
Excelente para combatir problemas de tiroides, es un gran depurativo del organismo

SANDIA
Por su gran contenido de agua es una excelente depuradora del organismo. Recomendada para combatir la trombosis y el endurecimiento de las arterias.

TOMATE O JITOMATE
Por su alto contenido en vitamina “A”, es ideal para el crecimiento de los niños. Por su alto contenido en vitamina “C”, previene enfermedades bronquiales e infecciosas. Tonifica los riñones pero no debe abusarse del tomate en caso de enfermedades renales.

UVA
La uva es importantísima para los niños, pues les da energía y les ayuda a reponer el desgaste. Alcaliniza la sangre y evita el envejecimiento. Renueva el organismo, lo limpia, corrige el estreñimiento, combate problemas del hígado. La uva está indicada especialmente para combatir padecimientos renales, infecciones, enfermedades respiratorias, la diabetes, la urea. Tiene una maravillosa acción desintoxicante.

ZANAHORIA
Es la reina de las hortalizas en los jugos. Combate afecciones del hígado, neutraliza la acidez, alivia las úlceras. Sirve como diurético, alivia la diabetes, la gastritis, el reumatismo, la artritis, afecciones de bronquios y pulmones, reduce el colesterol. Combate el asma, la tos y la retención del orina.
Las zanahorias pueden reducir el colesterol debido a su contenido de pectina. Es posible que la gente con altos niveles de colesterol en la sangre lo reduzca entre 10 y 20% con solo comer dos zanahorias diarias. Esto podría bastar para llevar los niveles de muchas personas hasta un punto seguro.
Por cierto, la lechuga, los brócolis y las cebollas también contienen el ingrediente que, se supone, produce el éxito de la zanahoria (Pectato de calcio) y pueden producir resultados similares.

¡HAGA EJERCICIO!

Es posible que el ejercicio pueda disminuir la acumulación del colesterol dentro de las arterias, explica el Dr. Paul D. Thompson, cardiólogo de Rhode Island y profesor de medicina en la Universidad de Brown. “Una de las mejores maneras de elevar los niveles de HDL protector”, afirma el Dr. Thompson, “es mediante ejercicio vigoroso, que también reduce ligeramente sus niveles de LDL indeseable”.
“El ejercicio también podría incrementar la capacidad corporal de despejar la grasa de la sangre después de las comidas”, comenta. “Si la grasa no permanece en la sangre mucho tiempo, tiene menor oportunidad de acumularse en las paredes de las arterias. Hemos descubierto que los corredores pueden despejar la grasa de sus sistemas 70% más pronto que otra gente que no hace ejercicios.” Así pues, ¡¡¡¡¡PÓNGANSE EN MARCHA!!.

TAMBIÉN PIENSE EN EL MAÍZ.

En estudios efectuados por Leslie Earll, nutrióloga y dietista del Hospital de la Universidad de Georgetown, el salvado de maíz resultó tan eficaz para reducir el colesterol como el de la avena y las leguminosas. Las personas con alto nivel de colesterol que antes habían intentado controlarlo con una dieta baja en colesterol y reducción de peso, comieron aproximadamente una cucharada de salvado de maíz con cada alimento (mezclado con sopa o jugo de tomate). Después de 12 semanas, sus niveles de colesterol disminuyeron un apreciable 20%. “Esta abundante fibra baja en calorías merece mucha más investigación”, comenta el estudio.

ARMAS POTENCIALES CONTRA EL COLESTEROL

Las siguientes substancias pueden también combatir el colesterol elevado:
TE NEGRO. O más precisamente, los taninos que contiene, pueden ayudar a controlar el colesterol. Un estudio descubrió que quienes habitualmente beben té con una alta dieta en colesterol, presentan niveles dentro del rango normal.
ACEITE DE LIMÓN. Saborizante habitual en la comida oriental, el aceite de limón disminuyó el colesterol en más de 10% en un estudio. Tal vez actúe interfiriendo mediante una reacción enzimática o inhibiendo la formación del colesterol a partir de grasas más simples.
ESPIRULINA. Una forma de algas rica en proteínas que a menudo se vende en polvo o tabletas, la espirulina redujo tanto el colesterol total como los niveles de LDL en voluntarios japoneses con alto colesterol que tomaron siete tabletas de 200 miligramos después de cada comida.
CEBADA. Considerada durante mucho tiempo como un cereal sano alto en fibras, la cebada puede tener el mismo potencial reductor de colesterol que la avena. En estudios con animales, dos componentes químicos de la cebada disminuyeron un 40% los niveles de colesterol.
SALVADO DEL ARROZ. Esta fibra puede ser tan eficaz como su prima, el salvado de la avena. Estudios preliminares con hámsteres demostraron que el salvado del arroz redujo en más del 25% el colesterol.
CARBÓN ACTIVADO. Finamente molida, esta sustancia, que a menudo se toma para aliviar los gases, puede fijarse a las moléculas del colesterol en el organismo y escoltarlas al exterior sin que produzcan daño. En un estudio, los pacientes perdieron hasta 41% en los niveles de LDL después de tomar unos siete gramos de carbón activado tres veces al día durante cuatro semanas.

ESTREÑIMIENTO

Todo lo que sube debe bajar. Así lo demostró Sir Isaac Newton, mientras estaba sentado bajo un manzano. Lo que entra debe salir. Usted demostró esto al sentarse en el excusado esta mañana. O ¿No fue así?
¿O fue ayer por la mañana cuando evacuó su intestino por última vez? ¿O el día anterior? ¿O algún día frío pero memorable del año pasado?
El estreñimiento o constipación del vientre no es cosa de juego. A veces puede ser doloroso; pero a menudo es fácil encontrar la causa de sus lentos movimientos de intestino. Puede ser falta de fibra en la dieta, insuficiente consumo de líquidos, tensión, medicamentos, falta de ejercicio y malos hábitos intestinales, afirma el Dr. Paul Roussseau, Jefe del Departamento de Geriatría en el Centro Médico Carl T. Hayden Veterans Administration en Phoenix Arizona.
Consideremos todos estos factores, así como algunas maneras de remediar la situación.

¿ESTÁ REALMENTE ESTREÑIDO? – Usted cree que tiene un problema, pero ¿Es así? Como a muchos de nosotros, a usted se le ha bombardeado durante casi toda su vida con propaganda sobre laxantes que tratan de darle la impresión de que una evacuación intestinal diaria resulta fundamental para la buena salud, lo cual no siempre es así, afirma el doctor Marvin Schuster, Jefe del Departamento de Enfermedades Digestivas en el Centro Médico Francis dgar Key en Baltimore, Maryland.
El doctor Schuster sostiene que mucha gente se ve sometida al estreñimiento percibido: Creen estar estreñidos cuando no es así. En realidad, la necesidad de defecar varía considerablemente según el individuo. Para algunos, tal vez pueda considerarse normal evacuar tres veces al día, en tanto que para otros tal vez basten tres evacuaciones a la semana.

¿ESTÁ TOMANDO SUFICIENTES LÍQUIDOS? – Nuestros expertos están de acuerdo en que lo primero que debe hacer una persona estreñida es revisar su dieta. Los elementos más importantes en el menú para combatir el estreñimiento son la fibra dietética y los líquidos. Abundantes cantidades de ambos resultan fundamentales para mantener suave el excremento y ayudarlo a pasar por el colon.
¿Cuánto líquido y cuánta fibra necesita usted? Comencemos con el líquido. Un mínimo de seis vasos de líquido, y de preferencia ocho, deben ser parte de la dieta diaria de todo adulto, afirma Patricia H. Harper, dietista titulada en la región de dgardrg Pennsylvania, y vocera de la American Dietetic Association. Cualquier líquido es eficaz, pero “el mejor es el agua”, comenta.

COMA MUCHA MÁS FIBRA. Muchas personas no ingieren suficiente fibra en sus dietas, declara Harper. La American Dietetic Association recomienda un consumo diario de 20 a 35 gramos de fibra dietética para todos los adultos y al menos 40 gramos para quienes padecen estreñimiento.
¿De dónde proviene la fibra? “De sus carbohidratos complejos, como los que contienen los granos enteros, la fruta y las verduras”, explica Harper. No es difícil incluir 40 gramos en la dieta diaria si se escogen con cuidado los alimentos. Por ejemplo, media taza de ejotes le darán 5 gramos; una manzana pequeña proporciona 3 gramos y un plato de cereal de salvado puede darle hasta 13 gramos. Sin embargo, los que más proporcionan fibra son las leguminosas secas cocinadas, las ciruelas, los higos, las pasas, las palomitas de maíz, el cereal de avena, las peras y las nueces; pero cabe hacer la advertencia de que debe aumentarse lentamente el consumo de fibra en su dieta, a fin de evitar ataques de flatulencia.

DÉSE TIEMPO PARA IR AL GIMNASIO. Usted sabe que el ejercicio es bueno para su corazón, ¿Pero sabía que también es bueno para su intestino? “En general, consideramos que el ejercicio regular tiende a combatir el estreñimiento porque mueve el alimento más rápido por el intestino”, sostiene el doctor dgard R.. Echner, profesor de medicina y jefe de Hematología en el Departamento de medicina en la Universidad de Oklahoma.

ADIESTRE SU INTESTINO. Durante toda nuestra vida, muchos nos acondicionamos a ir al baño no cuando lo requiere nuestro intestino sino cuando lo creemos conveniente. No obstante, si se soslaya la necesidad de defecar, puede llegarse progresivamente al estreñimiento; empero, nunca es demasiado tarde para mejorar los hábitos intestinales. “El momento más natural para ir al excusado es después de un alimento” – Así que escoja uno, el que quiera, y diariamente después de ese alimento siéntese en el excusado durante diez minutos. Con el tiempo, usted acondicionará su colon para que actué como lo propuso la naturaleza.

Además: Relájese y tome las cosas con calma – Ría con ganas – No abuse de tabletas laxantes… y ¡¡¡¡¡¡muy importante!!!!!!

NO SE ESFUERCE. – Por más que tenga la tentación de pujar para salir de su estreñimiento, no es prudente hacerlo, pues corre el riesgo de producirse hemorroides y fisuras anales, que no sólo resultan dolorosas, sino que también pueden empeorar su estreñimiento al reducir la abertura anal. Además, pujar también puede elevar su presión sanguínea y disminuir su frecuencia cardiaca. El doctor Rousseau afirma que ha sabido de varios pacientes ancianos que se desmayaron y cayeron del excusado, a veces sufriendo de paso alguna fractura, lo que de nuevo nos lleva a Isaac Newton y las inmutables leyes de la gravedad.

Adolfo Zúñiga García
e-mail azunigag.2@gmail.com

martes, 27 de mayo de 2008

aprendizaje autónomo

EL APRENDIZAJE AUTÓNOMO EN EL CONTEXTO MULTIGRADO

La cotidianeidad de las prácticas educativas vuelven rutinario el proceso enseñanza aprendizaje puesto que lo envuelve un conjunto de elementos que benefician y/o, en su caso, limitan el desarrollo del aprendizaje autónomo en los alumnos. Éstos limitantes pueden ser el ambiente social, institucional, sindical, económico, entre otros.

Sin embargo considero que el docente, aún en contra de la adversidad contra la que lucha su función debe de tener un conjunto de habilidades didácticas que le permitan desarrollar el aprendizaje autónomo en sus educandos

El aprendizaje autónomo es aquél en el que se ponen de manifiesto el conjunto de capacidades desarrolladas para aprender. Para lograrlo considero necesario fortalecer y ayudar a los alumnos en la adquisición de estrategias que permitan éste propósito puesto que la mayor parte de las prácticas educativas son predominadas por el uso excesivo del verbalismo en el que se abusa de la palabra para educar a los alumnos.

En el contexto multigrado, como en todos los contextos educativos se requiere que los alumnos tengan estas herramientas que les permitan avanzar gradualmente hacia la independencia educativa. Para ello se necesita favorecer en los niños la curiosidad por aprender, la capacidad de buscar información, la expresión oral y escrita con claridad y sencillez, la habilidad para organizar ideas en esquemas o textos y otras habilidades necesarias para que los alumnos aprendan cada vez con mayor autonomía.

Las actividades que permiten lograr el aprendizaje autónomo en el aula multigrado son entre otras las historietas, modelados, escenificaciones, programas de radio, actividades permanentes instalación de rincones de trabajo, conferencia infantil, uso sistemático de la biblioteca, sin embargo esto no limita la creatividad del profesor en el diseño de innovaciones estratégicas

. Mediante el uso de las anteriores se pretende alcanzar lograr la autonomía de los estudiantes, dejando de lado las prácticas tradicionalistas que aíslan al alumno del maestro en un proceso no interactivo que jerarquiza, señala y estigmatiza dos roles distintos en el que se realiza un transmisión de conocimiento en lugar de la construcción interactiva e interdependiente a través del trabajo colegiado.



Elaborado por: José Luis Rivera Lara.
Curso: El Aprendizaje Autónomo en el Aula Multigrado.
Encarnación de Díaz Jalisco.21 de mayo de 2008

viernes, 23 de mayo de 2008

Maestros de la Chona.

Hola a todos los interesados en el Blog "Cursoseducativoschona" - Les saludo desde lagos de Moreno, Jalisco... La cuestión es: Como dijo Don William Sheskeaspeare... "Ser o no Ser... ese es el dilema...

Es notorio que no hay ningún interés en el trabajo docente, respecto a mantener un blog vía internet, el cual dentro de sus pretenciones estaba dejar constancia del trabajo con nuestros alumnos, de su problemática y las posibles soluciones al mismo...

¿Pueden contestar eso en forma coherente?

Y que conste... no significa lo anterior nada diferente a lo que se anota.

Esperando sus comentarios, quedo de ustedes, su seguro servidor.

Adolfo Zúñiga García.